lunes, 12 de noviembre de 2018

De fuera para dentro y otra vez fuera

Se zarandean las copas
de los árboles
como si imitaran
la danza de la lluvia;

las palomas circundan
las chimeneas,
en busca el calor del hogar.

A penas se ve gente
por la calle
y los pocos,
van encofrados de algún plástico,
que todo le resvala.

Pero hace frío; y aunque no llueve,
cala la humedad.

¿Qué tendrán los días grises
para iluminar las palabras?

Begoña M. B.


3 comentarios:

  1. Los días grisis tienen inmovilidad física y largos pensamiento, amiga. Me ha gustado.

    Beso

    ResponderEliminar
  2. Los días grises son la perla de la nostalgia. Tu poema es la perla, la nostalgia, el color gris de las palomas que vuelan

    ResponderEliminar
  3. las palomas circundan
    las chimeneas,
    en busca (d)el calor del hogar.
    En esta estrofa o falta una "d" o después de la coma de chimeneas es "buscando" -que es gerundio-

    ResponderEliminar