-Buenas tardes
-Buenas tardes. ¿Qué desea?
-¿Tiene usted poemas sueltos?
-Sí, señor. ¿Los quiere clásicos
o modernos?
-No sé, de todo un poco,
revueltos.
-¿De humor, filosóficos, de amor?
es que hay mucha variedad. Los hay incluso de los que no dicen nada y otros de
una superficialidad e incultura que espantan.
- Bueno, deme cuarto y mitad de
cada clase.
-¿Es usted maestro, no?
-¿Maestro? Que va, que va. Yo soy
pintor de brocha gorda, y me encargaron pintar unas paredes en casa de una
señora culta y elegante, la marquesa de Bienmirar, para más señas y me ha
pedido que empapele una pared con algo que sea muy poético.
-¿Y cuantos metros tiene la
pared?
- Unos catorce metros cuadrados.
-¡Uy! entonces va a necesitar
muchos poemas. ¿Los quiere con letra grande o pequeña, papel corriente o
pergamino?
-No sé ¿cual es mejor?
-¡Hombre! el pergamino da más
lustre, aunque es más caro.
-¿y cuanto me tendría que llevar?
- Pues por lo menos, así
calculando por encima, unos veinte kilos
-¿Tanto?
-Claro, supongo que usted querrá que
la pared quede poética, poética
-Sí, sí, eso quiero.
-Pues lo dicho. Se lo preparo
ahora mismo
-¿Y pegamento?
-Ah, tengo uno muy bueno, que
pega con fundamento, con fomento, con...un momento, voy a ver.
¡Pepita, Pepita! arranca todas
las hojas de los libros de poemas que escribiste que aquí hay un tonto que
quiere empapelar una pared con cosas poéticas y le vamos a vender veinte kilos
de tus sandeces, esas que nunca pudiste vender, y le vamos a ganar dinero.
¡Anda, date prisa!
-Aquí tiene usted sus veinte
kilos de poemas variados. Para pegarlos, rima con rima, ripio con ripio y así,
si ve usted algún poema libre, esos los puede poner como quiera, boca abajo,
apaisados, unidos por alguna quintilla, o simplemente, los pone usted al azar. Antes
debe dar una buena imprimación a la pared con pegamento versifiquina de resina,
que es como una pasta parecida a la leche merengada, porque algunos poemas
tienen mala leche. Pero si quiere, aquí tengo un producto moderno internáutico
que llaman pegaversos, que es bueno y muy barato, o sea, el engrudo de toda la
vida.
-Ah, pues muy agradecido ¿Y
cuánto le debo?
- Cinco mil dólares esterlinos.
- Ah, pues no me parece caro.
¿Pero cree usted que le gustará a la señora marquesa
-Quedará encantada. Créame.
-Aquí tiene su paquete...y estas
hojitas sueltas de poemas modernísimos de regalo, por si le hace falta para
otras cosas corporales.
-Adios, buenas tardes.
-Buenas tardes.
¡Pepita, Pepita! ¡Qué éxito con
tu poesía. Sigue escribiendo y desahógate, que este negocio es bueno. Y, a lo mejor, te dan el
premio de poesía grafítica, cuando lo lean las grandes personalidades que van a
casa de la Marquesa...
© Luis Vargas Alejo
Alguna utilidad hay que sacarle a la poesía, no?
ResponderEliminarYa lo había leído, no se en cual senda. Me sigue pareciendo interesante.
Besitos
Bien símpático, señor mío. Amén de que tiene su mensaje: cómo no. Por igual, que Bego, me parece haberlo leído antes.
ResponderEliminarAbrazos
Es posible que estuviera puesto en LA SENDA POÉTICA vieja.
ResponderEliminarAcabo de publicar en Lulu mi novela autobiográfica y, como siempre, al transformar Lulu mi archivo lo ha desconfigurado y desde el capítulo 8 todo se ha bajado hacia la mitad de la página, con lo cual está feísimo. Todavía no lo tengo en mi poder pero ya me han comunicado que me lo han enviado. Si yo pudiera enviaros el archivo por correo...pero como es muy grande no me lo permite. ¿Sabriais como hacerlo sin WiZinc?
Ñoooo! Ya era hora...trabajaste en silencio: eh?. No sé el porqué no pudiste editarlo bien, antes de que lo imprimieran. No puedes enviarla en un PDF? Bueno, esa tarea queda para la Bego —que se entiende muy bien con estos asuntos de la cibernética.
ResponderEliminarMe alegras el día: en verdad. Muchas veces te pedí que te ocuparas de Siul...pero, siempre tenías una excusa.
Felicitaciones + Fuerte abrazo, maestro-novelista-poeta-pintor...dejémoslo en intelectual.
Cuando a Lulu se le envia en PDF, dicen: "debe incrustrar el tipo de letra en el PDF o no podemos editarlo" y eso, te juro que ni lo entiendo ni sé como se puede incrustrar en un archivo el tipo de letra cuando se ve que lleva uno determinado. Hay que enviarlo en Word y ellos lo convierten en PDF a su gusto. Lo que yo quiero saber es como enviartelo a ti y a Bego por correo. Pesa 32.5 MG y no sale por Yahoo.
ResponderEliminarVaya, pienso que los Srs de Lulú no ayudan mucho. Bien, si Bego no indica el modo, se me ocurre que puedes enviarmelo por capítulos; los voy imprimiendo...hasta que tenga la novela completita. Esperemos por la Bego. Hace rato que no leo nada; así que me viene muy bien tu novela, para ver si logro retornar al hábito de leer algo, más allá de filosofía —casi voy estudiando junto con María; creo que merezco un pedacito del Título que ella aspira—. Así que no se duerma, que necesito leer algo que, realmente, me interese. Dale!
ResponderEliminarTe lo acabo de enviar comprimido por el programa WinRar. Dime si lo recibiste y tu lo puedes abrir o descomprimir. Si no puedes, tendrás que bajarte el WinRar. Es la única solución
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