Entre
abandonos y promesas
fluctúa la esperanza azul
fluctúa la esperanza azul
que
nos sostiene, en este paraíso
de
la filosofía.
Tajantes
palabras consignan los discursos
para
el bien de la igualdad…
esa
palabra tibia que enamora
y
desgarra.
Yo
fui un eco en la euforia de una mística,
un
creyente descreído ante su fe.
En
este Olimpo azul
se rasgan las concepciones acerbas,
se rasgan las concepciones acerbas,
mientras
me voy despidiendo
hacia
una inconforme lobreguez.
Pichy
Me parece magnífico, amigo. Tus poemas existenciales, me encandilan.
ResponderEliminarBesos
Muchas gracias, amiga. me contenta el que te guste.
EliminarBesos
Estos son los poemas que me gustan de ti, Pichy, los que no son farragosos, los que dicen sin decir, los que son sintéticos y pareciera que te salieran del corazón (¡jóder lo que he dicho, qué barbaridad¡)Se me encendieron las candilejas, pues como dice Bego, a mi también me encandilan.
ResponderEliminarYo no lo quise decir y lo dices tú. Jo!!! Pues que sepas que, seguro, seguro, le salen del alma.
Eliminarmetafóricamente, po'zi
EliminarMuchas gracias, amigo. Pues, coincidimos en el gusto...lo que hay veces que estoy farragoso, enrevesa´o y trastoca´o. Está bueno eso "del corazón". El problema es que, bno ya lo sabemos, lo que busco en el poema es "decir" “descargar”—otros buscan la musicalidad, el ritmo, la belleza de imágenes, etc. —, y, decir, sin caer en el panfleto es muy difícil para mí. me duelen muchas cosas de este mundo...muchas ni debieran preocuparme; pero, soy como soy, y a estas alturas... La edad y las contradicciones que me rodean —y las que me golpean— me hacen dedicar tiempo al mundo, a la sociedad...y, en lugar de aprovechar el tiempo en superarme como escribidor de versos, voy a la política, y, para relajarme: al mar y los barquitos — me consuela que otros pierden su tiempo jugando en la red o intercambiando con desconocidos en FB: cada loco con su tema—. Entonces, no creo que escriba con el corazón, no, en verdad, si con algún órgano escribo, ha de ser con el hígado —u otra víscera—. Entonces todo lo que me sale es lóbrego, y, tengo decenas de intentos que desecho, y, si no fuese por la Senda, quizás ni escribiría nada; no sé si es que la neurastenia me tiene en sus manos, pero, estoy hecho un amargado que se pasa la vida furioso, descontento, autosuficiente…qué se yo.
EliminarAbrazos
Te comprendo, amigo, porque yo me siento igual que tu. Hay veces que me gusta la poesía hermética y farragosa, otras prefiero lo más simple y sintética. Trato de explicar que no se deben asonancias y las hago, que o se escriban sonetos y después me doy cuenta que uien los escribe bien es un gran trabajador de la poesía con un alto nivel de estrategia e inteligencia. Y si tu tiendes a la política, yo lo hago al existencialismo y a la esencia del ser humano porque también me duelen las cosas de la humanidad. Y cuando más me relajo es pintando, porque, en general, también estoy amargado no salgo de mi estado de confort y soy un gran egoista. Y creo que todo cuanto os enseñé (tratando de estudiarlo antes) la facilidad que parecía tener para hacer poesía, tanto ensayo como hice, lo he olvidado, casi que, hoy, no me interesa y no escribo poesía porque ni me salen las palabras, ni los temas, ni nada de nada. No sé si es la neurastenia, pero la edad y hartura de la vida, sí que es. Cuando leo algunos de tus comentarios amplios, sensatos, inteligentes y bien documentados...no sé que cntestarte. Un abrazo
EliminarPues, creo que bien sabes contestarme. También que seguirás escribiendo y encaminándonos; porque la poesía nos gusta, y eso no se cambia de un día para otro. Verdad que estamos escribiendo poco —sobre todo: yo—, pero eso es circunstancial. No escribo; pero, no dejo de leer poesía, y cuando leo se me despierta el deseo de escribir...y, si bien, no estoy concluyendo casi nada, tengo muchos poemas iniciados que, en su momento, he de concluirlos. También está que, al aumentar los conocimientos, uno respeta más al poema —y a los demás; porque, a veces digo voy a subir este trabajito...y, después pienso: si yo sé que no sirve, no logré el poema, para qué presentárselos—. Y, no buscando excusas, es una realidad que cuando me siento mal físicamente, me relajo más viendo noticias o videos-películas de mar y barcos, que sentado en la PC tratando de escribir algo. Eres un poeta, digamos, por naturaleza: seguirás escribiendo. Sabemos que la poesía sí alivia los males del estado mental; porque requiere de alguna concentración y distanciamiento, y uno se mete en sí mismo y expulsa muchos de esos males que nos llevan a los estados emocionales negativos.
ResponderEliminarCuídate, maestro.
Fuerte abrazo
Creo que los dos, sois grandes poetas y que os estais acurrucando en la arruga. Bien me vale que las enfermedades son punzadas aterradoras; que si no te mata una maceta lo hace la monotonia; que nos duele lo que no podemos cambiar;que es una mierda esto de nacer para sufrir y encima morimos en el intento. Asi que, haganme saber como levantarles ese ánimo antes de que la senda sea un cementerio, que todavía no tengo preparado el traje de halloween, y sus mercedes me están asustando.
ResponderEliminarA mi me gustaría contestaros a los dos pero tengo la poesía en bandolera y solo se me ocurre esto:
EliminarYa se van acortando las tardes
planeando la luz por los tejados
que amarillean con rojos y malvas.
Ya se oye el canto de luna
y la piedra filosofal se cubre de oro.
Ya se aventa la parva en el aire
y el ave cruza hacia su nido.
Ya es otoño, amigo, ya es otoño
y lo noto en mi sangre, en las leguas
del tiempo, en el verbo del verso
herido por el rayo, en los años.
Las primeras nieves han caído.
Las cabezas de Sierra Nevada están blancas,
lo mismo que mi pelo cano, que mi barba nívea,
que mi verso blanco.
El tiempo no pasa el valde, se cobra
siempre su estipendio y su labranza
llevándose la esperanza,la poesía,
nuestros sueños y la vida.
© Luis Vargas Alejo
Ja! Siempre tu agradable decir, amiga. No preocupes, el ánimo va con el día. En mi caso pasa que, de momento, he visto detenido el ritmo de mi vida, y aun no me adapto —no es fácil—. No había sentido la edad, de verdad que no; llegué a los 65 años viviendo como siempre. La enfermedad que me aqueja no es una enfermedad que se cree en un día; pero, yo no me sentía nada —sabía, desde mucho, que tenía enfisema y bronquitis crónica; pero, ni una tosecita en la mañana, nada—, hasta el 6 de enero 2016. Aun hoy, no me da ni catarro, no tengo tos alguna, nada —y me ha faltado voluntad para dejar los cigarrillos—. Sé que entro en crisis cuando me viene el mareíto y la debilidad y se me pierde la voz, un cansancio enorme…entonces solo me alivio encerrado en mi cuarto con el climatizador a full. Solo veo la calle desde la ventanilla de un coche —de la casa a la oficina, o, de la casa a casa de mi hermano menor—. Mas, ya me iré acostumbrando a la vida monástica —ya soy un viejo, y, me consuelo con que no soy el único...jajaja.
EliminarBeso, amiga.
No está mal el poema, ni lo que dice, amigo.
ResponderEliminarAbrazos
Gracias Pichy por halagar mi poema. ¿Sabes? yo hasta los 67 estaba regular, pero desde que me dijeron lo del cancer prostático, no hago más que mear. Ni duermo de noche, ni pinto, ni escribo, ni puedo ir lejos de casa porque me meo, me meo, me meo, y como los ángeles, ya ni tengo sexo ni na. Y te juro, que no me puedo acostumbrar. Y como soy tan burro, tampoco dejo de fumar. Y a mal de muchos, consuelo de tontos, decían los parias y proletarios hasta que harticos de tó se arrojaron a la mar.
EliminarEntonces, hay que tener la mente en algo; hay que buscar otros disfrutes...tenemos que escribir pintar leer, lo que sea. Yo sigo trabajando y tratando de mantener mi personalidad. Y lucho por adaptarme a las nuevas circunstancia; porque el hombre está en la mente, y mientras no se pierda, hay vida. No debes renunciar al sexo; pienso que es lo peor que puedes hacer. Pinta y escribe, amigo. Mira documentales interesantes, en fin: llegas hasta donde puedas. Cuando estoy en crisis, me encierro, pero, me pongo a ver noticias, documentales de interés, o de mi gusto: estoy al día del estado de todas las Armadas del mundo, de lo último sobre barcos y navegación, busco —o trato— la verdad detrás de los acaecimientos políticos; no me pierdo ningún nuevo documental de la serie “documentos del Imperio” de la joven periodista estadounidense Abby Martin, etc . Tengo toda una colección de videos, que considero interesantes, y viéndolos me alivio —aunque muchos me lo sé de memoria—. Trato de no acostarme de día, y de acostarme a dormir abt de medianoche. No dejo de estar al tanto de lo que pasa en mi religión o asociación fraternal, como la llaman —me vienen a consultar o me llevan en un carro al templo ante cada dificultad que se nos presenta—. Escribe hombre, escribe y pinta, que tus dolencias no te afecten la psiquis. La mía sí me afecta el cerebro; porque, la falta de oxigeno lo daña —pero, eso es cuando estoy en días de crisis…y ya voy aprendiendo a conocer cuando viene un “mal momento”, y detengo el ritmo. Lo que sí no puedo es “beber”…y, esto sí lo soporta sin dificultades: quién lo diría. Solo en muy contadas ocasiones me he tomado un traguito de ron y a veces o un vaso de vino en las comidas. Nada, vamos avante Maestro, y que el tiempo se encargue de nosotros.
ResponderEliminarAbrazo
Pd.- Pasemos la página de nuestras calamidades físicas, y, acojámonos a aquello de "joven ha de ser, quien lo quiera ser"
Primero contestaré a esto: "No debes renunciar al sexo; pienso que es lo peor que puedes hacer."
ResponderEliminarYo no he renunciado al sexo, me ha obligado el cáncer de la próstata. Las inyecciones que me pongo contra el cáncer han anulado la testosterona de mis gónadas y mi aparato genital se ha secado por completo. No puede erizarse, no puedo sentir el vétigo de la atracción sexual y soy como un eunuco con un pene totalmente infantil. Por eso me dijo el médico SSPM, que yo creí que significaba "sano, sanote, puro machote" y no, significa "solo sirve para mear"
Después te ontestaré el resto de tu escrito
Disculpa, amigo; qué pena. Yo pensaba que lo de la próstata ya había pasado. Bueno, al final, nadie te puede quitar lo baila´o. Lo que deseo es que no dejes de escribir; porque, UDS dos son los que me impulsan, y yo necesito alcanzar mi ritmo, mantenerme ocupado en cosas de mejor provecho, que las que me están ocupando.
ResponderEliminarFuerte abrazo
Más que escritor, he sido siempre un observador, pero no me ha interesado nunca la política, ni mucho la historia, aunque leí mucho sobre política e historia, pero como mi memoria es muy mala, no puedo competir contido en discutir u opinar sobre quien dirige el mundo y por qué y me acomplejo, porque yo solo soy un aprendiz de poeta porque en la poesía, desde muy joven, encontré mi naturaleza y mi ser. Pero tampoco escribí bien poesía ni me aprendí de memoria -porque como digo es muy rala- las normas de la clásica y sus características. Luego la vida me hizo ser coordinador de un departamento de siniestros de seguros y allí me esforcé en aprender las leyes del seguro, las formas de capitanear aquel barco, conocer la gravedad de un accidente, saber algo de derecho civil, algo de penal, algo de medicina traumatológica, algo de peritaciones y mucho de transacciones con abogados de los perjudicados por causas culpables de nuestros asegurados. Y fui intuitivo, astuto y muy duro con la gente de mi equipo para dar grandes resultados a la multinacional. Y hoy, no me acuerdo de casi nada de todo aquello, porque no era mi vocación ni mi sentir, porque yo solo quería ser poeta y no pudo ser. Uno fracasa por ponerse el listón muy alto y no darse cuenta que no tiene cualidades atléticas para dar un salto tan alto que le diera a la caza alcance.
EliminarMi estimado, a la política poco importa que gustes de ella o no: ella va a todos, se refleja en tu plato, en tu casa, en tu coche, en lo que ves en la TV...ella nos tiene. Yo no soy político, en el sentido que suele dársele al término; pero, me gusta la historia, y nadie ha logrado apartar la historia de la política y la filosofía. La Juventud, la dediqué a otros menesteres, dejando que otros se ocuparan de mi ideología —porque esto es otra de las causas de que sufren, con o sin dolor, los que no interesan de la política—. El desinterés político que manifiesta medio mundo, es un gran logro para los "políticos": es un triunfo. Entonces, al comprender esto, y, aprender la necesidad de "dudar" para no ser manipulado; me lleva a interesarme en la política...vivimos en sociedad, queramos o no, y, como a unos les gustan las flores, a mi no me gusta que me manipulen y me pastoreen en el rebaño. No, yo quiero tener mis ideas, mantener firme, sobre bases fuertes, mi ideología y filosofía existencial. La apolítica es un engaño que nos hacemos a nosotros mismos. Tal ya expresé, medio mundo se declara apolítico; pero, los apolíticos tienen sus ideologías; estén conscientes o no, de ello. Tú dices que no te interesas la política; pero sé, que quieres decir que no te interesan los políticos y sus partidos y rejuegos, que no eres un luchador político, etc. Tu ideología, tu pensamiento político está en tus poemas: no lo puedes evitar. El pueblo más apolítico del mundo es el estadounidense; pero, también es el más “adoctrinado” al sálvese quien pueda en su lucha por lograr “el sueño norteamericano”. No te engañes: el hombre es tan “animal político”, como social.
ResponderEliminarAh , y sí que eres un poeta: un buen poeta…que no hayas logrado el éxito, que no seas reconocido: es otra cosa. Eso pasa en todas las profesiones…las bases para el 1er trasplante de corazón, las ofreció un asistente, empírico —autodidacta, no era ni enfermero titular—, que al final de su vida logró un modesto reconocimiento. Sobran ejemplos.
Abrazos, maestro
Sí yo leí a Aristóteles de joven y es verdad que según su teoría todo el ser humano es un "zoon politikon" «animal cívico» y el cual a diferencia de los animales posee la capacidad de relacionarse políticamente, es decir, crear sociedades y organizar la vida en ciudades (polis) y como todos somos ciudadanos de una polis, somos politicos porque vivimos en comunidad. Pero esto es una definición para explicar que el ser está humano no se puede abstraer de los que pasa en el conjunto de la sociedad porque está inmersa en ella. Pero no quiere decir que tengamos que ser constructores de la polis, ni estar de acuerdo a gustar de como está construida la polis, ni en su estructura, ni en sus leyes, ni en sus normas de convivencia. Hoy la palabra político está asignada a quien dirige, administra o gobierna una "polis" (País) y politólogo a la persona que estudia las diferentes formas o ideologías que conllevan la organización social. La ideología me interesa porque en ella se basa mi bienestar o no, pero no me interesa quién la lleva a cabo porque, al final, la desvirtúan por muy bien pensada o hilada que esté en la teoría, ya que la práctica sobre la sociedad es muy difícil de aplicar en su conjunto, pues cada zoon politikon, lo ve y entiende a su manera. Unos les da igual como lo hagan y a otros se oponen a como lo hacen, es decir, unos mandan y otros obedecen, más las diferencias sociales y personales marcan la política como buenos y malos, rojos y azules, derechas e izquierdas y siempre hay enfrentamientos, guerras, ricos y pobres. Y como por selección natural los gobernantes que imponen su ideología suelen ser los que mejor viven y como pez gordo se como al chico. Y como eso no tiene remedio y luchar contra el poderoso es inutil, es por lo que yo no me siento político ni me interesan las políticas, voy " a mi bola" y vivo al margen de los mandamases, tratando de nadar y guardar la ropa. No me interesa la politica, ni la religión, aunque sea, sí, un zoon politikon.
ResponderEliminarBien, eso es; puedes intentarlo así...mas, al final, no lo logras: porque, tu psiquis te lleva, hasta inconscientemente, a escribir socializando, y, cuando socializas de defines a un bando; porque, el subconsciente, no se neutraliza fácilmente, y refleja negación o aceptación; postura ante la realidad; conformidad o inconformidad; filosofía —de cualquier corriente—; etc. Lee cualquier poema tuyo que no sea de evasión —entiéndase: erotismo o amor intimista; canto a la naturaleza, etc…cuidado y no escojas uno donde, a pesar del tema, socialices—. La poesía sincera, de oficio, desnuda la filosofía del autor y su clase social o posición a favor de una u otra clase, así como su posición dentro de la misma…así, sucede al narrador: cuando narra, aun con más fuerza que el poeta —que puede escribir en “códigos”—, declara su posición filosófica y política —que ya tiene otras definiciones, contemporánea, dentro de la filosofía política—. Pero, está bien, tengo que respetar tu forma de pensar. Ya sabes cómo yo pienso al respecto; pero, todos tenemos derecho hasta autoengañarnos, creer en los santos y dioses, etc. En fin “cada loco con su tema”.
ResponderEliminarFuerte abrazo, amigo mío.
Luego tambien estudio psicología en la Universidad y me di cuenta que el subconsciente es un espejo sin cristal, en el que te miras y no te ves, pero te envia imágenes que haces conscientes y no sabes por donde te llegaron. Y la usas porque se acumularon a traves de los sentidos sin que te dieras casi cuenta y eso es lo que se queda grabado. Lo que recogen tus sentidos conscientemente, si te gusta, lo mantienes y almacenas en los distintos archivos de tu disco duro. Y lo que no te gusta lo criticas o lo deshechas, olvidándolo por importante un comino, o bien, lo transformas y lo distorsionas a tu sentir y parecer con los patrones de lo que aprendiste al leer, al convivir, a lo que te parecio importante o verdad o a lo que simplemente son las ideas generales de convivencia del general de los mortales. No nos autoengañamos, es que necesitamos para vivir en paz con nosotros mismos, distorsionar la realidad, aceptarla y sublimarla. Pero siempre te queda la duda de si habré hech bien, aunque afirmes que lo que has dicho o has hecho está bien, porque las creencias influyen en tu conducta -y mucho- y porque te es necesario mientras no te demuestren lo contrario. E incluso aunque te lo demuestren, muchas veces, dices "no" no me interesa reconocer eso y te empecinas y entonces un día te das cuenta que eres tú y tus contradicciones, o no te das cuenta nunca y sigues siendo el político de turno porque te gusta, o ser un critico opositor, o porque te gusta seguir dándote la vida padre sin tener en cuenta a nadie ni a nada y mantener una posición de poder que te facilita estar por encima del bien y del mal y, como consecuencia dominar el mundo y engañar a los otros con las ideas que inventastes o que te apropiaste de otros inventores y las acomodaste a tu gusto. Al final, si eres capaz de darte cuenta, nadie vive una realidad verdadera, sino una ficción hecha realidad subjetiva y personal. Allá cada uno, no, es que somos así genéticamente.
ResponderEliminarBien, amigo. Valga la psicología. Por supuesto, que en la Academia me dieron algo de psicología; especialmente, para "aprender" a ser un líder, hacer que un grupo de hombres cumplan tus órdenes, aun al precio de sus vidas, etc. Pero, en política, vale, sobre cualquier otra cosa, la filosofía —la madre de todas las ciencias—. La filosofía es la que puede responder los "porqué", y es la base de las ciencias sociales. La psicología va, esencialmente, al individuos, mientras la filosofía va a las masas, a la sociedad. Aunque todos seamos sustituibles: existen los imprescindibles...aunque nos empeñemos en decir que nadie es Imprescindible, la historia nos demuestra lo contrario, y, lo demuestra en todo: desde el deporte, la ciencia, y, claro está: la política. Mas, dejémoslo ahí.
ResponderEliminarAbrazo
Hay hombres que luchan un día y son buenos. Hay otros que luchan un año y son mejores. Hay quienes luchan muchos años, y son muy buenos. Pero hay los que luchan toda la vida, esos son los imprescindibles.
ResponderEliminarBertolt Brecht