Bebo
Valdés tocaba el piano
y
el mundo se movía a ritmo de Jazz.
Sabor
a Cuba, Tropicana y mambo.
Lágrimas
negras al son de bolero
en
un cuenco flamenco con albahaca y batanga
Mucho
Sabor a tiempos lejanos
cuando
la vida caribeña, era alegría con pan.
Música
revolucionaria del sueño americano
¡libertad,
libertad, libertad!
Y
Bebo dibujo el arte en pentagramas
con
un piano viejo, en la vieja Havana.
© Luis Vargas Alejo
Muy bonita melodía. El poema llega de la mano de Obama... Y nadie le esperaba en la escalinata, sin honores, sin alfombra roja, con lluvia...
ResponderEliminarEl poema nace de una película que vi en la tele hace dos días que se llamaba Chico y Rita, de dibujos animados, una historia de amor en Cuba de antes de llegar Obama, mucho antes.
ResponderEliminarNo la conozco, y mira que veo dibus..
ResponderEliminarPero mira el símil del comentario, el poema ha entrado igual que Obama en Cuba, y Bebo no regresó, aunque su Jazz se escuche en el mundo entero.
Fue una película que echaron en la 2 hace dos o tres noches y está heha por Fernando Trueba y los dibujos son de Javier Mariscal. La puedes ver aquí porque es muy buena:
Eliminarhttp://www.peliculasyonkis.com/pelicula/chico-rita-2010/
Bien me resulta el poema, amigo. Muy bien, la verdad.
ResponderEliminarAbrazo
Es que yo bebo con Bebo en los valles de "balde's"
ResponderEliminarDe mucha agilidad mental el Maestro...
ResponderEliminarmás que agilidad de mente es de frese
EliminarJajaja... Me río de los humorísticos comentarios...
ResponderEliminarEl poema es precioso.
¿Habana o Havana?...
Me suena a ron la segunda.
Aunque no sé si Bebo dibujo o dibujó, me lo bebí de un trago y me gustó mucho.
Felicidades, Luis.
Voy a ver si puedo ver esa peli luego.
Besosssssssss
A los tres.
Hummmmmmmmm
ResponderEliminarTengo que registrarme y no sé qué más para verla, y pagar, creo...
Ya la veré otro día
Ala, ala
ResponderEliminar