Como
todas las madrugadas
dialogo en silencio
con el
dinosaurio que entra por el balcón
a conversar.
Y
escribo cuanto me dice
mientras
acaricio su piel rugosa, dura,
de
los años que lleva soñando
en
su fosilidad.
Hay
un terco resplandor en la calima,
como
una hoja en blanco, diciendo:
¿y
ahora qué?
Entonces
comienzan los violines
a
rasgar, agudos e imperiosos, sonidos
de
nostalgia, soledad, amor y miedo,
y,
al fondo, se oye barritar a un elefante.
El
alba se confunde con el atardecer
y
se abre un espacio poético de graves incógnitas
la
lluvia que cae produce charcos
donde
nuestros ojos se reflejan.
El
perro se duerme al lado del amo
la
manzana mordida se oxida
y
mancha el papel de sustancia dulce...
es
entonces
cuando
escribo un mensaje de ayuda
lo
introduzco en una botella
salgo
de casa
camino
un poco
llego
hasta el río
y
lanzo la botella
casi
cuando amanece.
Después
espero:
esta
es la vida.
© Luis Vargas Alejo
Siempre será poético buscar imágenes del subconsciente, en ellas hay una realidad oculta.
ResponderEliminarEl poema me gusta, aunque sus asonancias surrealistas, sobre todo, primera y segunda estrofa, no me convencen.
Besos
Sí, ¡que le vamos a hacer! el subconsciente es ansí...creo que, con asonancias y todo, es perfecto porque impacta. ¿o no?
EliminarAsonancias apartes, las primeras dos estrofas no me van bien con el ritmo discursivo que denota el resto del poema. Por lo demás, lo encuentro muy bien. No sé si cambiando el comienzo...
ResponderEliminarEn el silencio de la madrugada
converso con el dinosaurio enorme
de los fósiles sueños.
(algo parecido, pero mejor, seguro puedes crear.
El mensaje sí que llega claro y con tino poético.
Abrazo
Casi que llevas razón. A ver si te parece ahora mejor. Vuelvelo a leer
EliminarPos, sí, mejora, mejora, amigo. Sabemos que eres un buen reparador...
ResponderEliminarAbrazo
Vale, ¿lo dejo así, pues?
EliminarPor el momento, diría que sí...voy aprendiendo que buena parte de los poemas, no terminan nunca: siempre queda la posibilidad de un cambio.
ResponderEliminarAbrazos
Efectivamente. Incluso se puede poner el final al principio y el medio al final o como se quiera y podría hasta no cambiar el sentido pues todo el idioma es arbitrario versatil
EliminarSantas palabras
ResponderEliminarAh! Tenga a bien su Señoría, que tantos mis armas para rebatirle, como para comulgar con su pensar: UD me las ha entregado. No hago más, que tratar de darles el mejor uso...y, si yerro, es porque no asimilé bien la clase.
ResponderEliminarDios permita larga vida a su Excelencia
Gracias pues
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